En solo una semana empecé a notar cómo el color volvía poco a poco. PUREESSENCE me dio la tranquilidad de enseñar los pies sin vergüenza

Llevaba más de 10 años sin enseñar los pies por culpa de esa uña amarilla del dedo gordo. Era horrible, parecía como podrida. Mi mujer me decía que fuera al podólogo pero me daba muchísima vergüenza. En la piscina del hotel siempre llevaba chanclas dentro del agua y la gente me miraba raro. Después de 6 semanas usando PureEssence por fin tengo una uña normal. Ya no tengo que esconder el pie ni inventar excusas. Este verano por primera vez en años voy a ir descalzo a la playa.

Mis uñas estaban amarillentas y súper feas, sobre todo las de los pulgares. Me daba muchísima vergüenza enseñar las manos. En el trabajo evitaba reuniones donde tuviera que señalar cosas en presentaciones. En verano no podía llevar anillos bonitos porque llamaban la atención hacia mis uñas horribles. Mi hija me preguntaba por qué mamá siempre llevaba las uñas sin pintar y cortas. Después de 5 semanas con PureEssence por fin tengo unas uñas normales y sanas. Ya puedo hacerme la manicura sin vergüenza y hasta me he comprado anillos nuevos.